Las patas de gallo son un tipo de arrugas de expresión que aparecen con el paso de los años en el contorno de los ojos. Normalmente estas arrugas comienzan a aparecer a partir de los 30-40 años y pueden llegar a resultar muy incómodas estéticamente. Aunque existen formas de prevenirlas, evitar su aparición es muy difícil, pero no te preocupes, ya que existen métodos que consiguen hacerlas desaparecer.
¿Por qué se forman las patas de gallo?
Antes o después, las patas de gallo le terminan saliendo a todo el mundo. El paso del tiempo es uno de los principales factores que provoca su aparición. A partir de los 30-40 años la piel pierde su elasticidad y comienzan a aparecer estas pequeñas arrugas en el rostro.
Pero no solo el paso de los años, otros factores como el tabaco, la expresividad facial, el estrés, el sol o el mal cuidado de la piel, también favorecen su aparición.
¿Cómo retrasar su aparición?
Evitar la aparición de las patas de gallo es muy complicado ya que la piel de esta zona del rostro es muy finita y la aparición de arrugas en esta zona es muy común.
Para retrasar su aparición lo máximo posible, puedes llevar a cabo una serie de buenos hábitos para cuidar tu piel.
- Hidrata la piel. Hidratar el rostro es fundamental para retrasar la aparición de las arrugas en esta zona del cuerpo. La piel debe comenzar a hidratarse pronto, en torno a los 20 años. También puedes utilizar cremas antienvejecimiento o utilizar cremas específicas para el contorno de los ojos.
- Automasajea tu rostro. Los masajes favorecen la circulación de la sangre y retrasan la aparición de estas arruguitas. Es recomendable masajear esta zona del rostro todos los días. Una vez al día relaja la zona ocular y con ayuda de los dedos empuja la piel de esta zona hacia fuera y hacia arriba.
- Evita el tabaco. El humo además de provocar muchos otros problemas, favorece el envejecimiento prematuro de la piel, por eso es fundamental que, si fumas, dejes de hacerlo cuanto antes.
Tratamientos para eliminar las patas de gallo
Eliminar estas pequeñas arrugas de expresión es muy sencillo gracias a la medicina estética. Uno de los principales tratamientos para eliminar las patas de gallo es el Botox. La inyección de toxina botulínica es uno de lo mejores tratamientos de rejuvenecimiento facial ya que consigue eliminar de forma eficaz las arrugas del tercio superior del rostro.
Se trata de un proceso muy poco invasivo y rápido. La inyección de esta sustancia no produce ningún dolor y los pacientes pueden continuar con su vida normal tras el tratamiento sin ningún problema.
Debes tener en cuenta que los resultados de este tratamiento no son definitivos ya que la pérdida de su efecto es gradual y los resultados tienen una duración de unos 4-6 meses, por eso se recomienda repetir el proceso. Los resultados se comenzarán a notar cuando hayan pasado tres o cuatro días después de su aplicación.
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